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El online y otros cambios decisivos en la educación empresarial

El online y otros cambios decisivos en la educación empresarial

En los últimos años, la formación para directivos ha experimentado cambios significativos. Factores relacionados con el desarrollo de la tecnología, cuestiones económicas y el cambio de perspectiva de las nuevas generaciones han introducido nuevas prácticas y modelos a los que se están adaptando todas las escuelas de negocios del mundo.

Según el informe GMAC 2018, de las más de mil empresas encuestadas, el 81% piensa en contratar un MBA (+11% en comparación con 2017). Principalmente se trata de grandes empresas, pero también entre las startups la tasa de contratación de Másters ha aumentado un 22% en comparación con 2017. Los sectores más interesados ​​en contratar esos perfiles son salud, tecnología y energía. Las especializaciones más solicitadas: análisis de datos (71%), marketing (70%) y desarrollo empresarial (74%). En cuanto a los salarios, varían según el tipo de título, especialización y país. En los Estados Unidos la base es de unos 105.000 dólares, en Europa de 65.000 dólares.

El mito de las startups de éxito nacidas de la nada ha contribuido a nublar un poco este tipo de formación. Puede que algo tengan que ver los ejemplos muy citados de Mark Zuckerberg o Steve Jobs, pero es cierto que muchas personas están convencidas de que Másters y startups son dos líneas paralelas destinadas a no encontrarse nunca. Sin embargo, aunque es cierto que solo el 5% de los recién titulados lanza una startup inmediatamente después del MBA, la mayoría de ellos piensa que algún día lo hará.

A veces, estas dos realidades se encuentran y crean experiencias muy exitosas, como en el caso de William Shu en Deliveroo. Además, tampoco es cierto que la aspiración de todo el mundo sea la de lanzar su propio negocio. Para muchas personas la mayor ambición en términos de negocios es escalar posiciones en la organización, como en el caso de Satya Nadella, CEO de Microsoft y Meg Whitman, ex CEO de Hewlett Packard y eBay.

El MBA, por tanto, no está muerto, pero necesita ser transformado e integrado. Los cambios y las tendencias de los últimos diez años en el sector de la educación empresarial están destinados a consolidarse. A medida que el interés en los Másters a tiempo completo disminuye, todas las principales escuelas buscan ofrecer nuevas soluciones. Hoy, un Máster debe proporcionar una visión global y estratégica de las áreas más relevantes de una compañía, pero, al mismo tiempo, cuidar la formación de las soft skills.

El aprendizaje de calidad sigue marcando la diferencia y puede llevar la carrera o una stratup al éxito, y debe mantenerse al día con las exigencias actuales. A los caminos ‘clásicos’ hoy se suman muchas otras propuestas de formación que poco a poco van ganando terreno. Entre las tendencias que han estado dando forma al panorama de la educación empresarial en los últimos años, John A. Byrne, ex editor ejecutivo de Businessweek, ha seleccionado algunas.

El cambio principal es, sin duda, la afirmación definitiva de la formación en línea. Los estudiantes ya están acostumbrados a recibir clases pregrabadas y on-demand en sus teléfonos y portátiles, sin encontrarse nunca físicamente con sus compañeros o profesores. La formación es cada vez más coordinada pero desagregada y personalizada, menos vinculada a un donde y un cuando. Un Máster en línea permite no solo una mayor flexibilidad horaria y facilidad de conciliación, sino que, además, y por su propia naturaleza, facilita la actualización constante del material, la personalización de los contenidos, la internacionalización y, también, permite ofrecer un precio algo más bajo que el de los cursos presenciales.

A este panorama que el desarrollo tecnológico ha ido preparando en los últimos años, ahora hay que sumar las exigencias de un mundo post-coronavirus. Es evidente que las medidas de distanciamiento social tardarán en desaparecer (estamos en mayo 2020) y muchos de los hábitos que estamos adquiriendo en esta fase se quedarán con nosotros. Entre éstos, la digitalización de muchos procesos. La posibilidad de asistir a clase por vía telemática será un requisito esencial para cualquier programa formativo. Es más, no es descabellado imaginar un mundo donde periodos de cuarentena se reproduzcan, y el aprendizaje continuo podría ser la manera para llenar estos ‘huecos’ productivos. La red pondrá en común el conocimiento transformando al alumnado en productor activo de contenido.

En los Estados Unidos, los MBA a tiempo completo de dos años registran un declive constante desde hace cinco años, por el contrario, las propuestas de formación en línea están aumentando a gran ritmo. Muchos estudiantes no tienen la posibilidad de interrumpir su carrera durante tanto tiempo, y un Máster online les permite combinar sus negocios con los estudios. A menudo, de hecho, estos programas están diseñados entre la escuela y la empresa. Eso sí, este tipo de enfoque exige un alto grado de compromiso y autogestión. Cualidades muy apreciadas en el mundo laboral actual.

Este fenómeno inevitablemente provocará una selección, después de la cual solo sobrevivirán las escuelas que puedan ofrecer cursos en línea de una calidad igual o superior a los presenciales. En cambio, aquellas que se subirán al carro sin pensar en una propuesta específica, diseñada para los nuevos tiempos, probablemente desaparecerán o experimentarán grandes dificultades.

Otra tendencia muy relevante en los últimos años es la inclusión de programas STEM-focused. La importancia creciente de las asignaturas científicas obliga a este cambio de enfoque, que también es necesario para la ‘caza’ de los mejores talentos internacionales. Las dificultades impuestas por la administración Trump a la obtención de visados de trabajo para los extranjeros, está favoreciendo las escuelas de negocios europeas, que atraen cada vez más talentos de otras partes del mundo, especialmente de Asia. Europa se está volviendo más atractiva incluso más allá de las grandes escuelas clásicas.

Las mejores escuelas de negocios del mundo están inscribiendo más mujeres que nunca. Es una política precisa que tiene como objetivo lograr la igualdad de género en los programas Máster. De momento, esta tendencia se está produciendo sobre todo en los cursos de primer nivel, mientras que la representación femenina todavía es demasiado baja en los programas de nivel inferior. Sin embargo, la dirección está marcada y las escuelas que puedan hacer alarde de la igualdad de género en sus matrículas tendrán una herramienta valiosa para reclutar a los mejores talentos.

El gran énfasis puesto en temas como el análisis empresarial, el aprendizaje experimental, el espíritu empresarial y la formación en liderazgo es otro de los grandes ejes de los últimos diez años en las escuelas de negocios. Casi no hay escuela en el planeta que no haya duplicado su propuesta en estas cuatro áreas clave, en gran parte debido a la demanda de las empresas. Es de esperar que esta tendencia se mantenga en los próximos años, con un mayor enfoque en la inteligencia artificial y el aprendizaje automático.

Finalmente, se debe mencionar el notable crecimiento de los masters especializados y las escuelas de negocios se han apresurado a ofrecer también una amplia gama de programas especializados que van desde la logística de la cadena de suministro, hasta el análisis de datos o el negocio digital.

Esade Executive Education ha desarrollado todos estos programas bajo la marca InOn. In house On Line.

Por Andrés Raya

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